Utrera, municipio catalogado como ciudad honorífica del flamenco. Pertenece a la comarca de la Campiña. Posee un patrimonio monumental importante, y todo el centro histórico está declarado Bien de Interés Cultural en calidad de Conjunto Histórico-Artístico desde 2002. Es considerada una de las cunas históricas del flamenco y un lugar de referencia en el origen del toro bravo, existiendo en su término municipal varias ganaderías famosas. También es destacable su cría caballar, que aporta yeguadas de reconocido prestigio.
Sus fértiles tierras le han dado la fama de ser el granero de Andalucía. Constituye cabeza comarcal y bajo su administración se encuentran las pedanías de Guadalema de los Quinteros, el Palmar de Troya, el Pantano del Águila, la Cañada, Trajano, Pinzón, las estaciones de Don Rodrigo y las Alcantarillas y otros poblados que deben su origen al Instituto Nacional de Colonización.
Antiguamente, también dependía del partido judicial de Utrera lo que hoy son las ciudades de Los Palacios y Villafranca, Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra y los pueblos de Los Molares y Las Cabezas de San Juan.
En cuanto a los servicios, Utrera cuenta con las ventajas de una ciudad media: centro hospitalario, juzgados, centros educativos, superficies comerciales, etc.
Utrera se encuentra bien comunicada, especialmente con Sevilla, de la que dista 29 kilómetros. De su estación de ferrocarril entran y salen cercanías que llegan a la capital cada media hora aproximadamente. Por carretera, cuenta con la autovía que reduce el tiempo de recorrido a 15 minutos. A trece kilómetros, la carretera Utrera – Los Palacios permite la conexión con la autopista de Cádiz.
Hoy, Utrera afronta el reto de continuar su crecimiento –demográfico, urbanístico, económico- conservando su marcada personalidad, definida en siglos, apegada a sus tradiciones, a su ambiente y a su forma de vivir y entender la vida.
Ante tu mirada, observarás edificios antiguos, destacando las dos iglesias parroquiales, el Castillo, plaza de armas medieval, y diferentes casas-palacios de los siglos XVI al XIX. Disfrutarás del contacto con Utrera y sus gentes paseando su conjunto histórico, compuesto por los barrios de Santiago y Santa María. En ellos descubrirás joyas de la arquitectura, como el artesonado mudéjar de las Madres Carmelitas, la planta elíptica de la iglesia de los Dolores o los salones historicistas del Ayuntamiento, sin olvidar el santuario de Nuestra Señora de Consolación que atesora aún la riqueza de romerías y peregrinaciones antiguas.
Aceitunas gordales, arroces, pastelería, anís.... Utrera, ofrece al gusto y olfato de nuestros visitantes, una oferta gastronómica sabrosa y rica, arroces, carnes, pescados y una variedad de guisos hacen que sentarse a la mesa sea una fiesta para el paladar. Especialmente, te proponemos un fin de fiesta gastronómico excepcional, a su buena cocina aún le supera su excelente repostería. Contando con casi una decena de confiterías y pastelerías, Utrera presenta una gran variedad de dulces y pasteles, destacando los famosos mostachones conocidos en toda España. Haciendas, ganaderías de toros bravos, caballos, marismas....
El campo utrerano ofrece una extensa red de vías pecuarias por la que pasear a caballo descubriendo nuevos parajes con encanto, muestra una variada y rica fauna en las lagunas del complejo endorreico y el brazo del Este y, además, ofrece al visitante haciendas y cortijos donde descansar, disfrutando del sosiego y la tranquilidad del campo. Por el último, el sonido del bronce de nuestras campanas se funde con el bronce de nuestro flamenco utrerano más puro, dejándote grabado un grato recuerdo de tu paso por Utrera, donde la fiesta de los sentidos está preparada para Ti.
Datos históricos:
Los primeros asentamientos datan de la época prehistórica. Se han encontrado numerosos restos del Neolítico y la época ibérica.
Durante la época romana, Plinio la sitúa entre las más notables de la Bética. Aunque no han aparecido restos de la ciudad romana, por la magnitud de su necrópolis podemos hacernos una idea de la importancia de la ciudad.
Tras la conquista cristiana, llevada a cabo por el rey Fernando III, en 1253 Alfonso X reparte las tierras, construyendo una fortaleza amurallada. Vuelve a caer en manos de los musulmanes en el año 1340. Fue definitivamente conquistada por el infante Don Manuel en tiempos de Alfonso XI. Sería destruida por Mohamed V en el año 1368. Enrique II hubo de aumentar sus privilegios para facilitar su repoblación.
Terminada la guerra de Granada, durante los siglos XVI y XVII adquiere un gran desarrollo urbanístico.
La Guerra de la Independencia supuso un duro golpe. Su recuperación sería lenta a lo largo de todo el siglo XIX.
Prehistoria.
Los abundantes restos arqueológicos encontrados, reflejan la constancia del paso del hombre por estas latitudes durante el Neolítico. Testimonio de dicho período son hachas, puntas de flecha, cerámicas, ídolos – placa y diversos utensilios.
En concreto se han hallado monumentos funerarios correspondiente a la cultura llamada megalítica, cuya extensión cronológica se sitúa en el marco del Neolítico al Eneolítico (del IV al V milenio), propagándose hasta la Edad del Bronce (2.500 A.C.) e incluso extendiendo sus últimas manifestaciones a la Edad del Hierro (800 A.C.)., siendo los más significativos los encontrados en la zona conocida como la Cruz del Gato.
Prerromano
Se han encontrado restos de origen fenicio, tartésico, turdetano, etc., que son testigos del intenso comercio que tuvo lugar en la zona durante este período.
Período Romano
Las primeras noticias recogidas de Utrera corresponden a su pasado romano, el mismísimo Estrabón en el Libro 3º de su Geografía, nos dice «La poblaron soldados del César que fueron eméritos y veteranos...» 23 años antes del nacimiento de Cristo. Representativo de esta época es el puente de Alcantarilla, que enlazaba el tramo de la Bética con el Norte, a través de lo que se llamó Vía Augusta, tal como confirma la inscripción aún presente in situ.
Existieron distintos asentamientos en el término municipal, de alguno de los cuales se conserva la toponimia como es el caso de Siarum, edificada en las tierras de la Cañada, Salpensa que se levantaba en el cerro de Alcázar (carretera del Coronil), Alice, en las tierras del cortijo del Torre Alocaz, Orippo al oeste del término y Leptis, soberbia fortaleza que se nombraba en los tiempos de la guerra del César.
Las dos necrópolis encontradas en el casco urbano, una en el Olivar Alto, que data de los siglos III a II adC, y otra en la carretera de Los Palacios, perteneciente cronológicamente a los siglos III-IV ya de la época cristiana, confirman que los que hoy es el casco urbano de Utrera, era en la época romana, un campo raso, rico en trigo, vid y olivos, de ahí su nombre Utrera de utrer, lugar o industria de odres para aceites y vinos, dos riquezas de sus campos.
Visigodos
De la época visigoda quedan restos sepulcrales de escatología cristiana, que se nutren del legado paleocristiano, con queda manifiestamente claro en las lápidas y terracotas, tipo funerario con anagramas de Cristo, símbolos del Antiguo Testamento y leyendas alusivas a la escatología cristiana.
Árabes
De la Utrera islámica, existen escasas noticias, los libros de repartimiento de Sevilla, no indican presencia islámica importante. El rasgo más significativo de este período es una mezquita mora que se emplazaba en el lugar que actualmente se encuentra la Iglesia Mayor de Santa María. No obstante, en la época islámica aparecen distintos poblados como indica la toponimia árabe:
- Facialcázar, cuyo origen corresponde a la ciudad romana de Salpensa.
- Alcantarilla, del árabe Al-qantar (puente), que debió ser un enclave ofensivo para el control de la vía interior, Via Augusta, que en esta época disfrutó de un intenso tráfico fundamentalmente ganadero.
- Alhorín, actualmente un cortijo que conserva su nombre Árabe.
Edad Media
De esta época data la primera noticia rigurosamente histórica sobre Utrera. Correspondiendo al año 1253, cuando Alfonso X lleva a cabo el repartimiento de sus tierras, tras la conquista de Sevilla. Hasta ahora Utrera, no había sido más que una alquería o un machar árabe con su torre de protección. Luego, día tras día, los repartidos para poblar Utrera (entre ellos una notable colonia judía) y cuantos llegados a la frontera se avecindaban en ella, pudieron y tuvieron ocasión para transformar la torre en castillo.
En los siglos XIII, XIV y XV, Utrera se convirtió en un punto militar estratégico de primer orden ligado a los avatares de la frontera cristiana contra los musulmanes.
Renacimiento
Terminada la Reconquista en el siglo XVI y la mitad del siguiente, Utrera entra en un período de prosperidad en el que se construyen parroquias, conventos, hospitales, se edifican casas nobles solariegas, se empiedran plazas y calles y se logra un regular abastecimiento de aguas. Este florecimiento económico, llega a su cumbre con Felipe II, siendo en1570 la primera población del próspero reino de Sevilla. Pero, los efectos de la peste bubónica de 1649, que dejó diezmada la población, y la mala política de los Austrias menores, cambiaron radicalmente el panorama.
Historia Moderna
La esperanza puesta en el siglo XVIII en las reformas ilustradas se vio frustrada. Sólo es posible el despertar gracias al tesón de la política borbónica y hay mucho que agradecer aCarlos III, sobre todo desde su reinado se manifiestan con claridad la repoblación y el mejoramiento de la Villa.
La Guerra de la Independencia y la ocupación de Utrera por los franceses, fueron causa de otra ruina, aun mayor que las anteriores, dejando a la villa en una difícil situación.
La vida local toma nuevo impulso con el Alcalde Don Clemente de la Cuadra y Jibaja (1842), que llevó a cabo obras importantes, como empedrados y alcantarillados, casas para obreros, mercado, cárcel, cementerio, casa consistorial, beneficencia, alumbrado, etc. con lo que la vieja villa comienza a sentirse ciudad, pretensión que no se consigue hasta el reinado de Alfonso XII (1877).
Los movimientos políticos y sociales del siglo XIX tuvieron también su natural repercusión en Utrera, como las banderías y antagonismos entre liberales y conservadores y demás facciones políticas, las luchas caciquiles, elecciones amañadas, los periódicos satírico-políticos, los alborotos y las huelgas.
La Guerra Civil de 1936, dejó una estela de sufrimiento y familias truncadas, a partir de ella, Utrera presencia las convulsiones propias de una sociedad agraria, con fuertes tensiones sociales, dedicada a la agricultura y con pocas perspectivas de industrialización.
En los siguientes años, realmente no hay grandes hechos que trasciendan fuera del pueblo, algunos acontecimientos importantes fueron: la devastación que sufrió en la riada de 1962, causada por el desbordamiento del arroyo Calzas Anchas; en 1963, fue el mayor productor de algodón a nivel nacional; la Coronación canónica de Nuestra Señora de Consolación, en mayo de 1964.
Hoy, Utrera es un típico ejemplo de población mediana, con algo más de 45.000 habitantes, que trabajan para mejorar su destino, y se esfuerza en vivir y trabajar para conseguirlo.
Utrera - cuna de la aceituna gordal
La pequeña Judería de Utrera: el callejón de "El Niño Perdido".
Cabalgata de los Reyes Magos de Utrera se viene celebrando desde el año 1957.
Ermita de extramuros del siglo XVIII
Edificio construido en 1514
Es una capilla carmelita construida en el siglo XVII y que fue remodelada a finales del siglo XIX
Capilla de pequeñas dimensiones de estilo barroco.
Antigua edificación con restos que se remontan a los inicios del siglo XVI
Edificio del siglo XVII.
Casa - Palacio del siglo XVIII
Castillo de origen árabe data del S.XIII.
Reserva Natural formada por tres lagunas: Zarracatín, Arjona y Alcaparrosa.
Convento del año 1645
Respostería fundada en 1880.
Nuestra Señora de Consolación patrona de Utrera.
Festival Flamenco donde se homenajean a personalidades del mundo artístico.
Festival para el deleite de los aficionados del flamenco
Festividad con más de cinco siglos de antigüedad.
Festividad de San Juan en el municipio de Utrera
Fiestas de carnaval de Utrera
Fiestas Navideñas de Utrera
Fuente octogonal con templete.
Convento del siglo XVIII, reformado en el siglo XIX
Templo de finales del siglo XVIII
Iglesia que data del año 1626
Iglesia gótica del siglo XIV con capillas barrocas y neoclásicas.
Edificio que parte de uno medieval. Se trata de un templo de grandes dimensiones.
Jornadas Culturales con el objetivo de poner en valor aspectos de la época que conserva Utrera
Mostachones de Utrera - dulce exquisito
Pastelería artesanal.
Pastelería fundada en 1898.
Casa fundada en 2002
Restaurante - cocina típica andaluza
Restaurante con cocina tradicional
Restaurante, especialidad en carnes y pecados, postres caseros.
Restaurante con la especialidad en comida tradicional andaluza y cocina española
Comida andaluza
Restaurante ubicado en el Castillo de Utrera
Romería de Fátima de Utrera
El santuario se levanta durante el primer tercio del siglo XVII sobre los restos de la antigua ermit
La Semana Santa es una de las festividades religiosas más importantes de Utrera.
Edificio construido a finales del siglo XIX
Verbena en honor a la Virgen María Auxiliadora de Utrera.
Utrera - cuna de la aceituna gordal
Hostal Restaurante el Paisano, 1960.
Mostachones de Utrera - dulce exquisito
Hacienda del siglo XVII - Turismo Rural de excelencia
Posada ecuestre para el turismo rural de calidad.
Hacienda ecuestre
Hostal Restaurante el Paisano, 1960.
Hostal familiar
Pequeño hotel del año 2008
Se ubica en una casa restaurada del siglo XVIII
Pensión Hidalgo II es un alojamiento familiar, situado en lugar privilegiado a la entrada de Utrera.